Gobierno de Estados Unidos vincula el paracetamol con el autismo
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Según información brindada por el diario El País La Administración de Donald Trump cree que ha encontrado un posible vínculo entre el autismo y el consumo de paracetamol durante el embarazo.
El presidente estadounidense lanzaba su anuncio este lunes en un acto en la Casa Blanca, acompañado por su secretario de Salud, Robert F Kennedy. En el anuncio, la Administración Trump también apuntaba la aprobación de un medicamento, la leucovorina —utilizado hasta ahora contra algunas anemias y cánceres—, para este trastorno del neurodesarrollo, que afecta a la comunicación y la manera de relacionarse.
“El acetaminofeno puede asociarse con un riesgo muy elevado de autismo”, ha asegurado el presidente estadounidense. “Recomendamos firmemente que las mujeres limiten su uso durante el embarazo a menos que sea necesario desde el punto de vista médico, como una fiebre muy alta”.
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“El aumento meteórico del autismo se encuentra entre los acontecimientos más alarmantes en la historia de la salud pública”, declaró el presidente en la sala Roosevelt, al asegurar que en dos décadas las cifras han crecido en un 400%. Cuando se produce ese tipo de escalada “sabes que es algo artificial, que es algo que están tomando”.
El propio Trump venía anticipando desde hace días un anuncio que, según él, puede acabar siendo uno de los más importantes de su mandato. “Creo que van a encontrar que será impresionante”, había declarado Trump este domingo en Arizona, durante el funeral por el activista conservador Charlie Kirk. “Creo que hemos encontrado una respuesta al autismo”, aseguraba. “Va a ser una de las ruedas de prensa más importantes que voy a dar jamás”.
El paracetamol, comercializado en Estados Unidos bajo la marca Tylenol, es uno de los analgésicos de uso más extendido en todo el mundo. Los médicos lo consideran un medicamento seguro: las embarazadas pueden consumirlo sin riesgo en casos de dolor o fiebre, a diferencia de otros analgésicos que pueden tener efectos secundarios durante la gestación. No tratar esos síntomas también es peligroso: sin mitigarse, la fiebre o el dolor pueden acabar desencadenando presión alta en la madre -y, con ella, complicaciones como la preeclampsia-, defectos de nacimiento o incluso la pérdida del bebé.
Ahora, los representantes del Gobierno estadounidense recomendarán a las mujeres embarazadas no recurrir a fármacos que contengan acetaminofeno, el principio activo del paracetamol, excepto para casos de fiebre alta.
Donald Trump y Robert Kennedy Jr, en la Casa Blanca, el 22 de septiembre de 2025.
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El anuncio de Trump llega después de que tras asumir su cargo al frente del Departamento de Salud, Robert F Kennedy prometiera una investigación sobre las causas del autismo. Kennedy, una de las figuras más polémicas de la Administración Trump, ha planteado en el pasado un posible vínculo entre el autismo y algunas vacunas.
La semana pasada, el comité de vacunas de los Centros de Control de las Enfermedades (CDC), nombrado por Kennedy tras despedir a los científicos que lo formaban, decidió dejar de recomendar la vacuna cuádruple viral, que protege contra la varicela, las paperas, el sarampión y la rubeola, y proponer en su lugar la triple vírica por un lado (contra las paperas, el sarampión y la rubeola) y por otro el compuesto contra la varicela.
No se conoce una única causa del autismo, un trastorno al que generalmente los expertos atribuyen una base genética y que se considera un espectro por la diversidad y la diferente intensidad de sus características de una persona a otra.
El Colegio Estadounidense de Obstetras y Ginecólogos (ACOG, por sus siglas en inglés) insiste en que el uso de Tylenol es seguro para las embarazadas y sus bebés.
“No hay que asustar a las pacientes embarazadas sobre los muchos beneficios del acetaminofeno, que es seguro y una de las pocas opciones que las embarazadas tienen para aliviar el dolor”, sostiene en un comunicado el director de práctica clínica de esta asociación profesional, Christopher Zahn. “Los trastornos del neurodesarrollo, en particular, son multifactoriales y muy difíciles de asociar con una única causa”.