Elon Musk acusa a Trump y pide su impeachment

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La relación entre el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, y el CEO de SpaceX y Tesla, Elon Musk, ha pasado en cuestión de semanas de una colaboración cercana a una confrontación pública sin precedentes. El desencadenante ha sido la dura oposición de Musk al proyecto de ley presupuestario insignia de Trump, pero el conflicto ha escalado rápidamente hasta convertirse en un cruce de acusaciones, amenazas y revelaciones explosivas.
El giro dramático en la relación entre Elon Musk y Donald Trump se produjo el jueves, cuando Musk respaldó públicamente la idea de un impeachment contra el presidente. Todo comenzó tras semanas de tensiones crecientes por el proyecto de ley fiscal de Trump, que Musk criticó abiertamente por considerar que dañaría la economía y perjudicaría a Tesla al eliminar incentivos para vehículos eléctricos. La disputa escaló en redes sociales, donde Musk respondió afirmativamente a una publicación en X que pedía el juicio político a Trump y sugería reemplazarlo por el vicepresidente JD Vance:
“Trump debería ser sometido a impeachment y JD Vance debería tomar su lugar”, a lo que Musk contestó simplemente: “Sí”
De la cooperación al enfrentamiento

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Durante los primeros meses del segundo mandato de Trump, Musk fue uno de sus aliados empresariales más influyentes. No solo aportó más de 280 millones de dólares a la campaña republicana, sino que también trabajó como asesor en la Casa Blanca y lideró la llamada «Department of Government Efficiency» (DOGE), un cargo que terminó la semana pasada. Sin embargo, las diferencias sobre la política fiscal, los subsidios a vehículos eléctricos y la dirección de la agenda tecnológica comenzaron a tensar la relación.
El punto de quiebre llegó con la discusión del «One Big Beautiful Bill Act», el proyecto de ley estrella de Trump que busca extender los recortes fiscales de 2017, aumentar el gasto militar y de seguridad fronteriza, y recortar programas sociales. Musk criticó duramente la propuesta, calificándola de «abominación repugnante» y advirtiendo que incrementaría el déficit nacional en 2,4 billones de dólares en la próxima década. Además, el empresario se opuso a la eliminación de créditos fiscales para vehículos eléctricos, medida que afectaría directamente a Tesla informó CBS News
El señor Trump dijo que Musk, el CEO de Tesla, estuvo presente durante todo el proceso de elaboración del proyecto de ley. El presidente afirmó que «nunca tuvo un problema» con la legislación hasta que se eliminaron las disposiciones relacionadas con los subsidios para vehículos eléctricos, lo que amenazaba el negocio de Tesla. El proyecto de ley revertiría algunos de los créditos fiscales para energía limpia bajo la ley de clima y salud de la era Biden, eliminando gradualmente un beneficio fiscal para vehículos de energía limpia.
Elon Musk acusa a Trump y pide su impeachment. El estallido público
La disputa, que hasta entonces se mantenía en privado, estalló el jueves cuando Musk utilizó su plataforma X (antes Twitter) para lanzar una serie de ataques contra Trump, incluyendo la sorprendente acusación de que el nombre del presidente aparece en los archivos del caso Jeffrey Epstein, insinuando que esa sería la razón por la que no se han hecho públicos todos los documentos. Trump, por su parte, respondió desde su red Truth Social calificando a Musk de «loco» y asegurando que la forma más sencilla de ahorrar dinero sería cancelar los contratos y subsidios federales que benefician a las empresas de Musk
El presidente también sugirió que Musk había perdido la cordura tras la eliminación del mandato de vehículos eléctricos, y que su oposición al proyecto de ley era una reacción a la pérdida de beneficios para Tesla. Las acciones de Tesla cayeron hasta un 15% tras las amenazas de Trump de cortar los contratos gubernamentales.
El conflicto ha trascendido el ámbito político y económico para convertirse en una batalla de egos y poder mediático. Musk, dueño de una de las plataformas sociales más grandes del mundo, ha utilizado su alcance para amplificar sus críticas, mientras que Trump, acostumbrado a dominar la conversación pública, ha visto cómo su influencia se ve desafiada por el empresario tecnológico. Observadores y analistas han señalado que Musk podría estar superando a Trump en su propio terreno: la guerra de narrativas en redes sociales.
Elon Musk acusa a Trump y pide su impeachment. Consecuencias e incertidumbre
La ruptura entre Trump y Musk no solo pone en riesgo multimillonarios contratos gubernamentales con SpaceX y Tesla, sino que también genera incertidumbre sobre la unidad del Partido Republicano en torno a la agenda presidencial. Aunque algunos líderes republicanos han intentado mediar, la confrontación sigue escalando, con ambos protagonistas negándose a dialogar directamente y utilizando sus plataformas para atacar al otro.
En resumen, lo que comenzó como una diferencia sobre política fiscal ha derivado en uno de los enfrentamientos más públicos y virulentos entre un presidente estadounidense y uno de los empresarios más poderosos e influyentes del mundo, con consecuencias aún imprevisibles para la política, la economía y la tecnología en Estados Unidos