Onda tropical adquiere fuerza y podría afectar el oriente de Cuba
Captura Facebook/ Lázaro Manuel Alonso
Una onda tropical ubicada sobre el noreste del Mar Caribe ha incrementado su potencial de desarrollo, y los pronósticos indican que podría afectar en los próximos días las zonas orientales de Cuba.
Según el Centro Nacional de Huracanes (NHC, por sus siglas en inglés), esta perturbación —identificada hasta ahora como AL94— ya genera lluvias intensas y tormentas eléctricas dispersas. Se espera que se desplace hacia el oeste-noroeste a unos 15-20 millas por hora (aproximadamente 24-32 km/h), provocando precipitaciones y ráfagas de viento en Puerto Rico y las Islas Vírgenes, para luego avanzar hacia República Dominicana.
De acuerdo con los pronósticos, en los próximos días las condiciones podrían volverse más favorables para que esta onda evolucione a depresión tropical, especialmente cuando se aproxime al área de las Bahamas. La probabilidad de que se convierta en ciclón dentro de las siguientes 48 horas se estima en un 30 %, pero esa posibilidad sube hasta un 80 % para el transcurso de los próximos siete días.
El NHC también monitorea una segunda onda tropical activa en el Atlántico, que muestra elevado potencial de desarrollo, aunque por ahora no parece estar en una ruta que la lleve directamente hacia Cuba. En caso de que ambas perturbaciones llegaran a transformarse en tormentas tropicales, según la lista oficial de la temporada ciclónica 2025, la primera recibiría el nombre de Humberto y la segunda Imelda.
Recomendaciones y alertas para la región
Habitantes de las Islas Vírgenes, Puerto Rico, República Dominicana, Islas Turcas y Caicos, Bahamas y regiones del oriente cubano deben mantenerse atentos a los boletines meteorológicos oficiales.
Es clave vigilar evolución del sistema, en especial sus cambios de velocidad y rumbo, los cuales podrían determinar si el centro de la perturbación toca tierra o limita su impacto a lluvias y viento fuerte.
Prepararse ante posibles lluvias intensas, inundaciones costeras y rachas de viento: asegurar viviendas, tener provisiones básicas y conocer los refugios habilitados en cada zona.
La temporada ciclónica del Atlántico 2025 aún no ha concluido, y fenómenos como este recuerdan la necesidad de mantener vigilancia constante. A medida que evolucione la onda AL94.