
Foto tomada de UNOTv
Senadores de California exigen a Trump frenar el uso de datos de Medicaid para deportaciones masivas. Adam Schiff y Alex Padilla, han exigido que la administración del presidente Donald Trump cese de inmediato el uso de datos personales de millones de beneficiarios de Medicaid, incluyendo información sobre su estatus migratorio, en operativos de deportación.
Senadores de California exigen a Trump frenar el uso de datos de Medicaid para deportaciones masivas: Revelación y preocupación por la privacidad
La polémica surgió tras una investigación de la agencia Associated Press que reveló cómo funcionarios federales de inmigración accedieron a información confidencial de inscritos en Medicaid, a pesar de las objeciones de profesionales de salud de carrera. Los senadores manifestaron su alarma en una carta dirigida a altos funcionarios del Departamento de Salud y Servicios Humanos (HHS) y del Departamento de Seguridad Nacional (DHS), subrayando que la transferencia de estos datos plantea serias dudas éticas y posibles violaciones a leyes federales de privacidad, como la Ley de Privacidad y la Ley HIPAA.
Según documentos internos y correos electrónicos obtenidos por la prensa, los funcionarios designados por Trump presionaron a los Centros de Servicios de Medicare y Medicaid (CMS) para que entregaran la información en un plazo de apenas 54 minutos. Los propios funcionarios de CMS intentaron oponerse, argumentando que compartir estos datos violaría regulaciones federales, pero finalmente se vieron obligados a cumplir la orden.
La información transferida abarca a beneficiarios de Medicaid en estados como California, Washington D.C. e Illinois, donde los programas estatales permiten que inmigrantes no ciudadanos accedan a servicios médicos financiados únicamente con fondos estatales. Expertos advierten que, además de facilitar la localización de migrantes para su deportación, el uso de estos datos podría afectar futuras solicitudes de residencia permanente o ciudadanía para quienes hayan recibido beneficios de Medicaid financiados por el gobierno federal.
Reacciones y demandas
Los senadores Schiff y Padilla exigieron que el HHS deje de compartir información médica confidencial y que el DHS destruya todos los datos obtenidos. Insisten en que la administración debe explicar bajo qué autoridad legal se realizó la transferencia y cómo se asegura el cumplimiento de las leyes de privacidad vigentes. Además, dieron un plazo hasta el 9 de julio para que las agencias federales respondan a sus cuestionamientos y detallen el uso que se dará a la información transferida.
El gobernador de California, Gavin Newsom, también expresó su profunda preocupación, señalando que el uso de estos datos por parte de las autoridades de deportación podría ser ilegal y representa un riesgo para la privacidad de todos los californianos.
Contexto político y legal

Foto tomada de Al Momento
La entrega de datos se produjo en un contexto de intensificación de las políticas migratorias en el sur de California, donde se han realizado redadas con apoyo de la Guardia Nacional. Exfuncionarios federales calificaron la decisión como inusual, ya que CMS rara vez comparte información tan sensible con otras agencias. Además, la transferencia podría desincentivar a los estados a colaborar con el gobierno federal por temor a consecuencias legales.
El uso de datos de salud para fines de control migratorio ha generado un fuerte rechazo entre legisladores y defensores de la privacidad, quienes exigen transparencia, respeto a la ley y la protección de los derechos de los beneficiarios de Medicaid. El debate pone en el centro la tensión entre las políticas migratorias y la protección de la información personal en Estados Unidos