Tubería rota inunda hogares y agrava enfermedades en Los Arabos

Imagen: CubitaNOW
En el municipio de Los Arabos, provincia de Matanzas, decenas de familias viven una pesadilla cotidiana por una tubería de alcantarillado rota que lleva meses inundando calles y viviendas. Esta avería ha transformado las áreas afectadas en un foco de insalubridad, mezclando aguas residuales con basura, lo que genera un ambiente propicio para la proliferación de enfermedades.
Cada lluvia intensa agrava la situación: las aguas negras invaden patios, cocinas y salas, mientras los vecinos, impotentes, observan cómo sus casas se deterioran sin que el gobierno local tome medidas efectivas.
“Así lleva un barrio meses con esta tubería de desagüe partida y no le dan solución”, relata uno de los afectados, según testimonios recogidos por el periodista independiente Mario J. Pentón.
La indiferencia oficial es alarmante: el presidente del gobierno municipal pasa diariamente por la zona, pero lo único que ha prometido es “pasarle una varilla para limpiar el desagüe”, una acción insuficiente que evidencia el desinterés gubernamental.
La crisis sanitaria tiene un impacto directo en la salud de los habitantes. La proliferación de mosquitos ha desencadenado brotes de chikungunya y dengue, enfermedades graves vinculadas al contacto con aguas contaminadas. Los vecinos denuncian que el problema se agudiza porque la zona está cercana a los lugares frecuentados por el gobernante cubano Miguel Díaz-Canel, espacios que el gobierno evita debido al deterioro visible en la comunidad.
Tubería rota inunda hogares y agrava enfermedades en Los Arabos

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En redes sociales, la denuncia ha generado indignación y frustración. Usuarios afirman que esta situación refleja un abandono sistemático:
“Eso no es solo en Los Arabos, es en toda Cuba”, comenta uno. Otro añade, “por eso hay tantas enfermedades raras… y a nadie le importa”. La frase recurrente que resume la realidad es: “Al gobierno no le importa el pueblo”.

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Esta crisis sanitaria no es exclusiva de Matanzas. Recientemente, el ministro de Ciencia, Tecnología y Medio Ambiente reconoció el colapso sanitario en La Habana, señalando calles cubiertas de basura y lodo tras lluvias recientes. Sus declaraciones sobre la necesidad de reformas estructurales y acción comunitaria evidencian que el abandono vivido en Los Arabos es un reflejo de lo que ocurre en toda Cuba.
Mientras tanto, los residentes continúan enfrentando aguas negras, enfermedades y la indiferencia del estado, con la esperanza de que su denuncia finalmente sea escuchada y que sus hogares recuperen la dignidad que merecen.
