El 10 de diciembre de 2025, fuerzas estadounidenses incautaron un petrolero de gran tamaño frente a las costas de Venezuela, en una operación que involucró a la Guardia Costera, el FBI y el Departamento de Seguridad Nacional. El buque, según revelaciones posteriores, transportaba crudo venezolano con destino a Cuba, lo que añade un nuevo capítulo a las tensiones entre Washington, Caracas y La Habana.
El presidente Donald Trump calificó la operación como la incautación del “mayor petrolero jamás capturado”, subrayando que formaba parte de una estrategia para presionar al régimen de Nicolás Maduro y cortar las redes de comercio ilícito de petróleo que, según Estados Unidos, benefician a organizaciones terroristas extranjeras.
Consecuencias económicas
Impacto en Venezuela
- Reducción de ingresos petroleros: Venezuela depende fuertemente de la exportación de crudo. La incautación de un buque de gran tamaño representa pérdidas millonarias.
- Mayor aislamiento financiero: Al ser señalado como parte de una red ilícita, el país enfrenta más dificultades para colocar su petróleo en mercados internacionales.
- Presión sobre PDVSA: La estatal petrolera, ya debilitada, podría ver afectada su capacidad de producción y distribución.
Impacto en Cuba
- Continuidad en la precariedad energética: La incautación del buque no modifica sustancialmente la situación de Cuba, donde las limitaciones de combustible y los apagones forman parte de una crisis energética crónica. El episodio refuerza una realidad ya marcada por la inestabilidad del suministro y la falta de alternativas sostenibles.
- Mayor presión diplomática y económica: Aunque el impacto material sea limitado, el hecho añade peso a la dependencia energética de La Habana y obliga a buscar nuevos socios o acuerdos en un escenario internacional cada vez más tenso.
Consecuencias políticas y diplomáticas

Estados Unidos
- Refuerzo de sanciones: La operación muestra la determinación de Washington de aplicar sanciones y cortar vínculos entre Venezuela, Irán y Cuba.
- Mensaje geopolítico: La incautación en aguas cercanas a Venezuela es una demostración de fuerza en el Caribe.
Venezuela
- Respuesta nacionalista: El gobierno de Maduro podría usar el incidente para reforzar su discurso, acusando a EE.UU. de agresión.
- Alianzas alternativas: Caracas podría intensificar sus vínculos con Rusia, China o Irán para compensar la pérdida de rutas hacia Cuba.
Escenarios futuros

Imagem: abc7
El presidente Donald Trump confirmó este miércoles que EE.UU. ha tomado el control de un barco petrolero frente a la costa de Venezuela, según refiere el medio CNN en Español.
“Como probablemente saben, acabamos de incautar un petrolero en la costa de Venezuela”, dijo Trump. “Un gran petrolero, muy grande, el más grande jamás incautado, de hecho”.
Si Estados Unidos mantiene operaciones similares, podría bloquear sistemáticamente el suministro de crudo venezolano a Cuba, generando un colapso energético en la isla y debilitando aún más la economía venezolana.
Existe la posibilidad de que, ante la presión, Venezuela y Cuba busquen canales diplomáticos para aliviar tensiones, aunque esto parece poco probable dado el endurecimiento de las sanciones.

Imagen: Otmaro Rodríguez
La incautación del petrolero frente a Venezuela con destino a Cuba no es un hecho aislado, y las consecuencias se sentirán tanto en Caracas como en La Habana. En el tablero geopolítico del Caribe, este episodio marca un punto de inflexión que podría redefinir las relaciones de poder y las alianzas estratégicas en los próximos meses.
