Padre cubano denuncia inacción de funcionarios por caso de niño hospitalizado desde hace 10 diez años
Imagen : Facebook Yenis Herrera Rodríguez
Una vez más, las redes sociales se convierten en el refugio desesperado de un padre cubano que, con el corazón destrozado, exige que su hijo Evian David Herrera Almeida—un niño que jamás ha conocido el calor de un hogar—pueda finalmente salir del hospital pediátrico José Luis Miranda de Villa Clara y vivir en familia.
Evian ha pasado toda su vida, diez años, hospitalizado. Aferrado a la esperanza, su padre no se cansa de denunciar ante funcionarios y dirigentes, incluyendo al propio Miguel Díaz-Canel, la indiferencia que ha mantenido a su hijo recluido, pese a que existen soluciones técnicas que harían posible su vida en casa.
“Paneles solares y aires acondicionados sí hay,” repite el padre, refutando las excusas oficiales y dejando claro que la falta es de voluntad y gestión, no de recursos.
Imagen: Facebook Yenis Herrera Rodríguez
Padre cubano denuncia inacción de funcionarios por caso de niño hospitalizado desde hace 10 diez años
La petición es sencilla y desgarradora: que Evian pueda saber por primera vez lo que es el calor y la intimidad de un hogar, como merece cualquier niño. A través de imágenes y mensajes, el padre muestra a su hijo paseando por las afueras de su sala, tratando de experimentar un poco del mundo exterior que la burocracia y el desamparo le niegan.
y ustedes cómo dirigentes no han sido capaces de hacer nada para resolver su problema, y para si hay dudas este niño q ven es mi hijo paseando por las afueras de su sala en contacto con el medio ambiente y aunque es muy doloroso y cierto esto lo escribo con el alma rota y mis ojos llenos de lágrimas porqué el amor por mi hijo es lo más grande q tengo
Mientras tanto, funcionarios de distintas instancias miran hacia otro lado y el caso de Evian sigue sin solución, reflejo de las tantas historias de familias cubanas que luchan a diario por derechos básicos. El clamor de este padre, que exige no solo compasión, sino acción y respuestas reales, se suma a una larga lista de reclamos ciudadanos frente a un sistema que no siempre responde con humanidad.
Hoy, el pueblo cubano y quienes apoyan esta causa se unen en una sola súplica: compartir el caso de Evian, amplificar la voz de un padre quebrado por el dolor y exigir a las autoridades que, de una vez por todas, hagan lo correcto. La infancia de Evian no puede esperar más.