Nueva actualización del SEN, avances lentos y persistentes fallas en el sistema
Imagen: Perfil de Facebook José M Solís
La crisis eléctrica que afecta a Cuba desde el apagón masivo del 15 de marzo de 2025 sigue dejando a millones de personas sin servicio eléctrico, mientras las autoridades reportan avances que parecen insuficientes frente a la magnitud del problema. La situación ha puesto en evidencia la fragilidad del Sistema Eléctrico Nacional (SEN) y la falta de soluciones estructurales para evitar que eventos de este tipo sigan ocurriendo.
En La Habana, el microsistema implementado para la zona occidental, que había permitido restituir el servicio en algunos puntos de la capital como Centro Habana, Cerro y San Miguel del Padrón, sufrió una nueva desconexión. Esto dejó nuevamente a oscuras a miles de habaneros y subrayó las dificultades técnicas para mantener una mínima estabilidad en el suministro eléctrico. La Empresa Eléctrica de La Habana informó que se trabaja «interrumpidamente» para restablecer el servicio, pero no ofreció plazos concretos para resolver el problema.
Empresa Eléctrica de La Habana: El microsistema, en proceso de desarrollo para la zona occidental, que había permitido restituir el servicio en varios lugares de la capital, sufrió una nueva desconexión. Se trabaja interrumpidamente en las acciones de restablecimiento. Sitio Web Cubadebate
Captura de Pantalla: Cubadebate
Por otro lado, en Matanzas, la central termoeléctrica Antonio Guiteras, una de las principales plantas generadoras del país, fue energizada desde Energás Varadero. Sin embargo, el proceso de arranque de la planta aún no ha concluido. Según el ingeniero Rubén Campos Olmos, director general del bloque yumurino, se estima que el encendido completo podría tomar entre seis y siete horas si se logra mantener estable la alimentación. Aunque Campos Olmos aseguró que las labores correctivas fueron certificadas, este no es el primer intento fallido de reactivar la Guiteras en situaciones críticas, lo que genera dudas sobre la fiabilidad de esta infraestructura clave.
No se trata de un arranque totalmente en frío, apunta Campos Olmos, por lo que se sugiere que se trate de un proceso que ocupe un estimado de entre seis a siete horas, si se logra mantener estable la alimentación a la Guiteras. Las labores correctivas fueron certificadas. Perfil de Facebook José M Solís
Captura de Pantalla: Perfil de Facebook José M Solís
En Camagüey, las unidades 5 y 6 de la central termoeléctrica de Nuevitas lograron sincronizarse con el SEN. Este avance es positivo para la región central del país, pero no compensa los retrasos acumulados en otras áreas clave. Mientras tanto, en Santiago de Cuba, una unidad de la termoeléctrica Renté está en proceso de arranque, aunque no se han ofrecido detalles sobre cuándo podría comenzar a generar electricidad.
El presidente Miguel Díaz-Canel declaró a través de sus redes sociales que mantiene comunicación constante con el Ministro de Energía y Minas, Vicente de la O Levy. Según Díaz-Canel, varias provincias han logrado establecer microsistemas y algunas unidades generadoras comienzan a sincronizarse. Sin embargo, estas declaraciones contrastan con la realidad que enfrenta gran parte del país: apagones prolongados y una población cada vez más frustrada por la falta de resultados concretos.
Captura de Pantalla: Perfil de Facebook Lazaro M Alonso
Nueva actualización del SEN. Una Crisis Recurrente
La actual crisis eléctrica no es un evento aislado; es un reflejo de problemas estructurales que han afectado al SEN durante años. La falta de mantenimiento adecuado, la obsolescencia tecnológica y las limitadas inversiones en infraestructura energética han convertido al sistema eléctrico cubano en uno altamente vulnerable. Aunque las autoridades suelen atribuir los problemas al embargo estadounidense o a factores externos como fenómenos meteorológicos, muchos expertos señalan que las fallas internas son igualmente responsables.
Impacto Social y Económico
La falta de electricidad afecta gravemente a los hogares cubanos y paraliza sectores clave como la industria y los servicios básicos. En un país donde los apagones son frecuentes, esta situación extrema agrava aún más las condiciones de vida ya difíciles para muchos ciudadanos. Además, los prolongados cortes eléctricos afectan también al suministro de agua potable y a otros servicios esenciales.
Exigencias Ciudadanas
La población cubana exige soluciones reales y sostenibles para evitar que esta crisis eléctrica se convierta en una constante. Los llamados «microsistemas» son apenas paliativos temporales que no resuelven el problema subyacente: un sistema eléctrico nacional colapsado por años de desatención e insuficiente modernización.
Mientras tanto, las autoridades insisten en que están trabajando «sin descanso», pero los resultados aún no se traducen en un alivio significativo para los ciudadanos. La paciencia se agota mientras Cuba sigue sumida en una oscuridad literal y figurativa que parece no tener fin.