Masones cubanos protestan en La Habana por autonomía y contra injerencia estatal
Imagen: Facebook Ismary Bacallao
La mañana de este domingo 6 de julio, la histórica sede de la Gran Logia Masónica de Cuba en La Habana fue escenario de una protesta inédita: decenas de masones cubanos se congregaron frente al edificio para exigir el respeto a la legalidad interna de la institución y denunciar la injerencia estatal en sus asuntos. La tensión escaló cuando los manifestantes, cantando el himno nacional y portando símbolos masónicos, lograron ingresar al vestíbulo pese a la resistencia de otros miembros y la presencia de la Seguridad del Estado.
La destitución del Gran Maestro Mayker Filema Duarte desata una crisis sin precedentes en la masonería cubana.
Imagen: Facebook Ismary Bacallao
El detonante de la protesta fue la convocatoria a una sesión de la Alta Cámara por parte de Mayker Filema Duarte, quien fuera destituido de su cargo de Gran Maestro el pasado 25 de mayo mediante una votación mayoritaria de los representantes de la Gran Logia. Sin embargo, Filema se ha negado a abandonar el liderazgo y, respaldado por sectores vinculados a la Seguridad del Estado, intentó realizar una sesión considerada ilegítima por la mayoría de la membresía masónica.
Masones cubanos protestan en La Habana por autonomía y contra injerencia estatal. Autoridades masónicas rechazan la convocatoria a sesión considerada ilegítima por la mayoría.
Los opositores a Filema, encabezados por el Diputado Gran Maestro Juan Alberto Kessell Linares y el Gran Secretario Bravo, sostienen que la sesión convocada por Filema constituye una violación extrema de la legislación masónica y una ofensa a la voluntad soberana de la organización, que ya había decidido su destitución. En un comunicado leído a las puertas de la logia, los líderes del movimiento reiteraron que la decisión tomada en mayo es “irrevocable” y llamaron a todos los masones a defender la autonomía y la dignidad de la institución.
El conflicto, que se arrastra desde el año pasado tras la salida del anterior Gran Maestro Mario Urquía Carreño en medio de un escándalo financiero, ha puesto en jaque la estabilidad interna de la masonería cubana. Los manifestantes acusan al Ministerio de Justicia y a la Seguridad del Estado de intervenir en la vida interna de la logia y de intentar imponer a líderes afines al gobierno, en lo que consideran un intento de socavar la independencia de una de las organizaciones fraternales más antiguas del país.
La jornada de hoy marca un punto de inflexión para la masonería cubana, que enfrenta el desafío de preservar su autonomía frente a presiones externas y divisiones internas. Mientras tanto, la comunidad masónica ha dejado claro que no está dispuesta a renunciar a su historia ni a su derecho a la libre determinación, y que la lucha por la legalidad y la soberanía institucional continúa.