Derrumbe del Hotel Comercio en Caibarién pone en evidencia el abandono del Centro Histórico de la ciudad
Según reportó Telecentro CNTV, fuerzas constructivas del territorio trabajan actualmente en la eliminación de elementos inestables para evitar nuevos desplomes y garantizar la protección de las personas que circulan por la zona. La intervención persigue, de inmediato, minimizar riesgos; sin embargo, la pregunta de fondo continúa abierta: ¿qué destino tendrá el Hotel Comercio?

Foto: Telecentro CNTV

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Un edificio que guarda heridas y memorias
El Hotel Comercio no es un edificio cualquiera. Su historia está marcada por la prosperidad portuaria de Caibarién en las primeras décadas del siglo XX. Fue referencia obligada para viajeros, encuentros, celebraciones y noches donde la ciudad parecía latir de otro modo.
Pero el tiempo hizo su parte.
La falta de mantenimiento, el abandono institucional y el desgaste natural condujeron al punto crítico. No se trata de la primera vez que su estructura cede: el 11 de julio de 2017, durante trabajos de rehabilitación, se produjo un derrumbe parcial que provocó la muerte de dos trabajadores y dejó varios lesionados. Aquella tragedia dejó marcado el edificio —y a la ciudad— con el peso de lo irremediable.

Foto: Telecentro CNTV
Desde entonces, su deterioro ha avanzado a la vista de todos. Lo que antes fue un hotel, hoy es casi una ruina abierta, “devorada por la naturaleza”, como expresó recientemente el caibarienense Arely Hernández Claro:
“Mientras la naturaleza se sigue apoderando de sus ruinas, mientras la lluvia se convierte en lágrimas que corroen en el tiempo, el Hotel Comercio guarda historias que jamás se borrarán.
Sus pasillos vacíos aún murmuran nombres, risas, promesas.
No es solo un edificio: es un altar de memorias, un refugio de lo que fuimos.
Y aunque el tiempo insista en desdibujar sus contornos, hay algo que ni el viento ni la lluvia podrán borrar: la dignidad de lo vivido.”Foto: Arely Hernández Claro / Facebook
Derrumbe del Hotel Comercio: Un símbolo herido, pero aún vivo
Hablar del Hotel Comercio es hablar de Caibarién, de su cultura, de su gente y de su manera de recordar lo que fue y lo que sueña seguir siendo.
El derrumbe reciente es, ante todo, un llamado urgente: a la preservación del patrimonio; al cuidado responsable de las estructuras históricas; y a la construcción de políticas que eviten que lo valioso se convierta en escombros.

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Porque cuando un edificio así cae, no cae solo: se derrumban también fragmentos de la memoria colectiva.

