Cuba recibe primer lote de todoterrenos UAZ ensamblados localmente

Imagen: UAZ
Cuba ha dado un importante paso en su cooperación industrial con Rusia con la recepción del primer lote de vehículos todoterreno UAZ modelo Patriot ensamblados localmente en la isla. Esta entrega, que tuvo lugar en julio de 2025, marca un hito en el fortalecimiento de la relación bilateral entre ambos países en un contexto económico complejo que afecta a Cuba y la hace buscar alternativas para su desarrollo industrial y comercial.
El ensamblaje a gran escala de los todoterrenos UAZ comenzó en Cuba en abril de este año, gracias a un acuerdo firmado entre la Empresa Integral de Servicios Automotores (EISA) de Cuba y la firma rusa ECHO-Export SRL. Se espera que la planta alcance pronto su plena capacidad operativa para producir hasta 500 vehículos al año, con la intención de ampliar la producción a clientes privados en un futuro cercano.
Este nuevo esquema productivo forma parte de una estrategia para perfeccionar los procesos de venta, recepción de pagos y preventa para compradores corporativos estatales, lo que permitirá optimizar las etapas de comercialización y entrega. De momento, el destino principal de estos todoterrenos está orientado al sector estatal cubano, donde serán empleados en áreas que requieren vehículos confiables y resistentes, como la agricultura, la defensa, la seguridad pública y trabajos en zonas rurales o de difícil acceso.
Cuba recibe primer lote de todoterrenos UAZ ensamblados localmente

Imagen: CubitaNOW
Diseño robusto de los UAZ
El diseño robusto de los UAZ los hace especialmente aptos para las condiciones del terreno cubano, caracterizado en muchas regiones por caminos sin pavimentar y accesos complicados. Además, estos vehículos han sido adaptados para el clima tropical de Cuba, incorporando componentes especiales como mangueras de silicona, radiadores de cobre y aceites preparados para altas temperaturas, soluciones que Rusia ha desarrollado para garantizar su adecuado funcionamiento en la isla.
Mitigar la dependencia del mercado externo
La fabricación local representa una vía para mitigar la dependencia del mercado externo y reducir el impacto del bloqueo económico y las restricciones internacionales que dificultan la importación de vehículos y piezas completas. Esta iniciativa forma parte de un contexto de estrecha cooperación entre Cuba y Rusia, que ha reforzado lazos en sectores estratégicos como energía, comercio y defensa. Para el régimen cubano, la alianza con Rusia es vista como una oportunidad para aliviar la crisis interna, mientras que para Rusia, mantener una presencia geopolítica en el Caribe es un objetivo clave.
Otro hito en la cooperación con Rusia

Imagen: UAZ
Más allá de la fabricación, este proyecto permite el desarrollo de capacidades técnicas en la industria automotriz cubana y la transferencia de conocimientos especializados. Históricamente, esta industria ha dependido en gran medida de importaciones o ensambles limitados, por lo que la cooperación con Rusia abre nuevas oportunidades para la diversificación y modernización del sector.
Sin embargo, a pesar de estas expectativas, la producción inicial está dirigida principalmente a entidades estatales, limitando el acceso para sectores privados y usuarios individuales. La planta ha anunciado planes para habilitar entregas a clientes particulares en el futuro, lo que podría dinamizar el mercado automotor cubano y dar respuesta a demandas que hasta ahora habían permanecido insatisfechas.
Esta evolución se inscribe también en un contexto en que Rusia ha donado lotes de vehículos UAZ a Cuba, como parte de un apoyo para la recuperación tras los recientes huracanes que afectaron la isla, reforzando la cooperación bilateral en la práctica. Por ejemplo, en 2024, Rusia entregó 16 unidades del modelo UAZ Patriot especialmente adaptados para las condiciones cubanas, destinados a tareas de recuperación y operaciones en zonas vulnerables.
Además, el gobierno cubano y la empresa rusa proyectan continuar ampliando el ensamblaje incluyendo otros modelos, como los vehículos Pickup y la línea de carga ligera Profi, buscando atender distintas necesidades del transporte y servicios en la isla. Está previsto también implementar un programa posventa y garantía sustentable con suministro periódico de partes y piezas rusas para asegurar la longevidad de los vehículos.
Este proyecto de ensamblaje local de vehículos todoterreno UAZ en Cuba representa un avance significativo en la cooperación industrial con Rusia, con impactos potenciales en la industria automotriz y la infraestructura de transporte cubana.
Ilusión versus realidad
No obstante, mientras la alianza estratégica se fortalece, la realidad diaria para muchos cubanos incluye limitaciones económicas y falta de acceso a bienes esenciales como vehículos y combustible, lo que indica que los beneficios inmediatos aún están concentrados en sectores estatales. El futuro del acceso privado a estos vehículos y la extensión de la producción serán factores clave para evaluar el impacto real de esta colaboración en el mercado automotor de Cuba.