Accidente en el Malecón habanero deja varios heridos: una avenida marcada por la tragedia
La mañana del 11 de diciembre de 2025 volvió a teñirse de sirenas y preocupación en La Habana. Un nuevo accidente en el Malecón habanero, uno de los paseos marítimos más emblemáticos de Cuba, dejó varios heridos —entre ellos una niña— cuando una camioneta taxi impactó contra un automóvil liviano en las inmediaciones de la embajada de Estados Unidos. Las imágenes difundidas en redes sociales mostraban un vehículo con daños severos en su parte trasera, reflejando la violencia del choque.
El siniestro, reportado inicialmente por usuarios en Facebook, generó un amplio debate sobre la frecuencia con la que ocurren estos accidentes en esa avenida donde confluyen historia, tráfico y una velocidad que en muchas ocasiones supera lo permitido. Aunque las autoridades no han revelado cifras oficiales sobre los lesionados, los testigos coinciden en que el incidente dejó un saldo preocupante.
De acuerdo con fotos preliminares compartidas por el usuario Alexander Ríos Cruz en Facebook, el choque al parecer involucró a una camioneta taxi, que colisionó por la parte trasera a un automóvil más pequeño.
Captura de pantalla
Un patrón que se repite: el Malecón como escenario de tragedias
Para los habaneros, los accidentes en el Malecón ya no son hechos aislados, sino parte de una realidad que se repite año tras año. La combinación de imprudencia, mala infraestructura y un parque automotor envejecido ha convertido este emblemático paseo en un corredor vial de alto riesgo.
Otros accidentes que han marcado la memoria
A inicios de 2025, un joven de 24 años falleció tras perder el control de su vehículo en la curva de G y Malecón, conocida por muchos como “la curva de la muerte”. Los vecinos recordaban que ese mismo punto había sido escenario de múltiples tragedias en el pasado.
En 2022, en las cercanías del Hospital Hermanos Ameijeiras, un choque dejó un fallecido y un herido grave. Los testigos aseguraron que el exceso de velocidad fue el factor determinante. Semanas después, otro accidente en la salida del túnel de Quinta Avenida cobró dos vidas, una escena que paralizó el tráfico durante horas.
En septiembre de 2025, la tragedia alcanzó a una joven vendedora ambulante que fue arrollada mientras cruzaba la avenida a la altura del Paseo del Prado. Ese caso generó una fuerte indignación porque evidenció también el peligro que enfrentan los peatones, especialmente quienes trabajan en la zona.
¿Por qué ocurren tantos accidentes en el Malecón?
Exceso de velocidad y negligencia
El Malecón, con su recta interminable y la brisa del mar golpeando los autos, invita a muchos conductores a acelerar más de lo debido. La invasión de carriles, los adelantamientos peligrosos y la falta de respeto al derecho de vía son comportamientos denunciados frecuentemente por testigos y vecinos.
Infraestructura deteriorada
La falta de señalización adecuada, el mal estado del pavimento y la poca iluminación nocturna crean un escenario propicio para los accidentes. Las curvas, como la de G y Malecón, así como zonas como la entrada del túnel o los tramos frente a la embajada estadounidense, son puntos críticos donde se acumulan reportes de siniestros.
Coordenadas estrechas, curvas peligrosas, señalización insuficiente y condiciones del pavimento, especialmente en tramos como el frente a la Tribuna Antiimperialista, aumentan el riesgo de siniestros graves.
Vehículos en mal estado y presión social
La crisis del transporte, el envejecimiento del parque automotor y la falta de repuestos obligan a muchos a circular con vehículos en condiciones precarias. Esto, unido al tráfico intenso de la avenida, aumenta los riesgos de fallas mecánicas y pérdidas de control.
Pero también se tiene que incluir la crisis del transporte público que empujan a conductores y peatones a situaciones de riesgo constante.
Una avenida hermosa… y peligrosa
El Malecón no es solo una vía. Es un espacio donde los cubanos conversan, pescan, cantan, ven amanecer o se toman un respiro frente al mar. Pero debajo de esa postal icónica late un historial de pérdidas humanas, familias destrozadas y silenciosas cicatrices. Para quienes viven dentro y fuera del país, cada nueva tragedia en esa avenida es un recordatorio de que la belleza también puede esconder riesgos ignorados por demasiado tiempo.
El accidente de este 11 de diciembre vuelve a levantar la misma pregunta: ¿qué más debe pasar para que la seguridad vial en el Malecón se aborde con urgencia y seriedad?