Fraude en Manicaragua destapa corrupción en la Unión Eléctrica cubana: «Este no es un hecho aislado»
La denuncia, hecha pública este viernes, provocó una respuesta inmediata de la Empresa Eléctrica de Villa Clara, que activó una comisión investigadora para esclarecer los hechos. Carlos Benavides, director Comercial de la entidad, confirmó que el trabajador implicado manipuló varias veces los recibos de electricidad, apropiándose de dinero de forma fraudulenta.
Confrontado con las pruebas, el lector-cobrador admitió su responsabilidad en el engaño, lo que condujo a su expulsión definitiva del sector, en una acción que la dirección de la empresa calificó como «contundente».
“Lamentamos profundamente que una conducta individual como esta empañe el esfuerzo y la honestidad de la gran mayoría de nuestros trabajadores. Desde el primer momento actuamos con celeridad y transparencia”, declaró Benavides.
El funcionario subrayó que la protección de los clientes es prioridad para la Empresa Eléctrica:
“Estas acciones son totalmente contrarias a los valores de honestidad, profesionalidad y responsabilidad que rigen nuestra labor. No toleramos el fraude y actuaremos con todo el rigor que exige la ley”.

Foto: Captura Henry Omar Pérez / Facebook
Críticas ciudadanas: ¿Una excepción o la punta del iceberg?
Sin embargo, el anuncio oficial no fue suficiente para calmar el descontento de muchos usuarios en redes sociales, quienes expresaron dudas sobre la magnitud real del problema y la profundidad de la investigación.
Dimarys Águila fue tajante:
“Si la UNE investiga a fondo, creo que las estafas superan a las de ETECSA. Desde inspectores corruptos, relojes con arreglitos, negociaciones con cobradores y ventas ilegales de todo lo relacionado con electricidad… Entre el bloqueo y la corrupción hemos llegado al aquí y ahora”.
Miurel Ladrón de Guevara también cuestionó la respuesta institucional:
“La nota habla de estafa, corrupción, falsificación… y la medida es solo separación definitiva. ¿Y el proceso penal? Además, para falsificar recibos se necesita complicidad. ¿De verdad creen que eso solo ocurre en Manicaragua? Ojazo y control con eso”.
Geidi María Rodríguez Martínez, desde Santa Clara, compartió su experiencia frustrante con la entidad:
“Todos los meses me venía un recibo de 700 o 900 pesos y, el mes que más apagones tuve, me llegó uno de 3 794. Fui a quejarme y me pelotearon. Llevo más de seis meses esperando al inspector”.
María Abreu Rodríguez planteó una duda común entre los clientes:
“¿La Empresa Eléctrica se entera del fraude por denuncias ciudadanas? ¿No hay control interno? ¿Quién supervisa a los cobradores? Es evidente que hay una componenda o un gran descontrol”.

Foto: Henry Omar Pérez / Facebook
¿Fraude aislado o corrupción estructural?
Aunque el caso de Güinía de Miranda ha sido tratado como un hecho aislado por las autoridades, los comentarios del pueblo revelan una percepción extendida de corrupción y desconfianza hacia la Empresa Eléctrica. El discurso oficial contrasta con múltiples denuncias sobre irregularidades en el cobro, mal funcionamiento de los medidores, negligencias en la atención al cliente y posibles redes de complicidad interna.
El caso deja muchas interrogantes abiertas: ¿Será procesado judicialmente el trabajador acusado? ¿Se investigará si hubo otros implicados? ¿Qué mecanismos de control fallaron? ¿Cuántos casos similares están pasando inadvertidos?

Foto: Tomada de Tribuna de La Habana
Fraude en Manicaragua destapa corrupción en la Unión Eléctrica cubana… una reflexión final
El escándalo en Manicaragua debe ser una alerta para revisar a fondo los procesos de cobro, control y atención al cliente dentro del sistema eléctrico nacional. Mientras las autoridades proclaman tolerancia cero al fraude, la ciudadanía exige justicia real, transparencia profunda y acciones ejemplarizantes más allá del discurso.