Musk advierte a congresistas: “Perderán las primarias” por apoyar el proyecto fiscal de Trump

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El clima político en Estados Unidos ha sumado un nuevo capítulo de alta tensión, protagonizado por el magnate tecnológico Elon Musk y un grupo de legisladores republicanos. El detonante ha sido la aprobación del proyecto fiscal conocido como «Big Beautiful Bill» (BBB), una iniciativa impulsada por el expresidente Donald Trump y que, según Musk, representa un riesgo fiscal irresponsable para el país.
La relación entre Musk y la administración republicana, que en sus inicios fue pragmática y colaborativa, ha evolucionado hacia un abierto enfrentamiento político. Durante el segundo mandato de Trump, Musk fue visto como un aliado estratégico, especialmente en temas de innovación y tecnología. Sin embargo, la ruptura se hizo evidente tras la salida de Musk de la dirección de DOGE, un episodio que Trump intentó cerrar con palabras cordiales, pero que pronto dio paso a acusaciones de deslealtad y amenazas de represalias económicas.
El expresidente no solo ha cuestionado públicamente la lealtad de Musk, sino que ha llegado a amenazar con la retirada de fondos federales destinados a las empresas del empresario e incluso con la posibilidad de su deportación, marcando así un punto de no retorno en su relación.
Musk advierte a congresistas: “Perderán las primarias” por apoyar el proyecto fiscal de Trump. Amenazas y desafíos políticos
La reciente aprobación de la BBB ha encendido aún más los ánimos. Musk, utilizando su habitual tono directo, advirtió a los congresistas republicanos que apoyaron la iniciativa: «Perderán las primarias aunque sea lo último que haga en esta tierra». Esta declaración, lanzada desde su plataforma X, ha sido interpretada como una amenaza directa y una muestra del peso político que el empresario está dispuesto a ejercer.
No es la primera vez que Musk arremete contra Trump. En junio, el empresario pidió públicamente un juicio político contra el exmandatario, lo vinculó con los polémicos archivos de Epstein y sugirió que el presidente estaba «fuera de control». Aunque posteriormente intentó suavizar el tono asegurando que «no es personal», las tensiones volvieron a escalar con la reaparición del megaproyecto fiscal.
En paralelo a este conflicto, Musk ha comenzado a promover la idea de un nuevo partido político que rompa con el tradicional bipartidismo estadounidense. En una reciente entrevista, dejó claro que podría utilizar tanto su plataforma X como su influencia empresarial para respaldar a candidatos que representen una visión «moderna, tecnológica y ética» de la política nacional. Este movimiento ha sido interpretado como un desafío frontal al liderazgo republicano y una señal de que Musk busca jugar un papel más activo en la configuración del futuro político estadounidense.

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Musk advierte a congresistas: “Perderán las primarias” por apoyar el proyecto fiscal de Trump. Un distanciamiento irreversible

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El cruce de declaraciones y amenazas entre Musk y Trump sugiere que el distanciamiento entre ambos es ya irreversible. Lo que comenzó como una alianza estratégica se ha transformado en un conflicto abierto, con repercusiones que podrían sentirse tanto en el ámbito político como en el económico y tecnológico del país.
A medida que se acercan las próximas primarias, la influencia de Musk y su capacidad para movilizar apoyos —o generar rechazos— será un factor a tener en cuenta en el ya de por sí volátil panorama político estadounidense.