Niña cubana con Atrofia Muscular Espinal necesita un panel solar para poder vivir en casa.
Foto:perfil de facebook de la mamá de la niña
Una madre cubana, Alianys Labrador González, ha hecho un llamado desesperado en redes sociales solicitando ayuda para su hija Yeilin López Labrador, una niña de apenas un año y medio que padece Atrofia Muscular Espinal Tipo 1 (Werdnig Hoffmann), una grave enfermedad degenerativa que compromete severamente sus músculos y sistema respiratorio.
A pesar de haber sido dada de alta médica hace nueve meses, la pequeña aún no ha podido regresar a su hogar.m La razón: necesita un panel solar que garantice el suministro eléctrico continuo para el funcionamiento de sus equipos médicos vitales.
Niña cubana con Atrofia Muscular Espinal necesita un panel solar para poder vivir en casa.
Una vida conectada a un ventilador
Desde los 7 meses, Yeilin vive conectada a un ventilador mecánico las 24 horas del día debido a una hipotonía generalizada.
Ha sido sometida a una traqueotomía y una gastrostomía para poder respirar y alimentarse. Su condición le impide moverse por sí misma y permanece postrada en una cama hospitalaria.
Aunque su estado de salud es estable y no requiere atención médica permanente en un hospital, su alta médica no se ha materializado en un retorno al hogar por la falta de condiciones necesarias.
Urge un panel solar para garantizar energía
Foto:tienda de Amazon
En Cuba, los frecuentes cortes de electricidad representan un grave peligro para pacientes como Yeilin. Su vida depende de un suministro eléctrico constante que le permita usar el ventilador, otros equipos médicos y mantener su cuarto climatizado.
Un sistema de paneles solares podría brindarle esa estabilidad,pero hasta ahora, no ha llegado la ayuda esperada.
Su madre insiste en que no pide dinero, sino que su mensaje llegue a las autoridades competentes o a instituciones que puedan ayudar a gestionar esta solución tan vital.
Un llamado a la solidaridad
Alianys Labrador clama por el derecho de su hija a estar en casa, en un ambiente seguro y familiar.
“No porque tenga una enfermedad tiene que vivir el resto de su vida en un hospital”, expresa en su carta.
La exposición prolongada en entornos hospitalarios también la pone en riesgo de contraer infecciones que podrían agravar su frágil condición. Su petición es clara: compartir su historia para que quienes tienen el poder de actuar lo hagan.
Ayudemos a que Yeilin regrese a su hogar
Cada niño merece crecer en el amor y cuidado de su hogar, más aún aquellos que enfrentan condiciones médicas tan difíciles.
Compartir esta historia puede marcar la diferencia.
La instalación de un panel solar no solo es una solución técnica, es un acto de humanidad. Ayudemos a que Yeilin vuelva con su familia. Su vida depende de ello.