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El Vedado colapsado por la basura y la indiferencia institucional

El Vedado, uno de los barrios más emblemáticos de La Habana y considerado durante décadas como un símbolo de modernidad y orgullo urbano, vive hoy entre montañas de basura, malos olores, mosquitos y abandono oficial. Las imágenes compartidas por ciudadanos en grupos como El Vedado de Hoy en Facebook, revelan una realidad que va mucho más allá de la estética: es una crisis de salud pública, de dignidad ciudadana y de gestión gubernamental.

La basura como paisaje cotidiano en el corazón de La Habana

Esquinas completamente desbordadas por desechos, contenedores rotos que ya no contienen nada, y una proliferación de ratas y moscas a plena luz del día han convertido a El Vedado en un ejemplo perfecto del colapso urbano de la capital cubana.

“En plena zona hotelera, no les importa nada”, denuncia una vecina del lugar mientras intenta espantar los insectos que invaden su balcón. La peste, la indiferencia y la impotencia se han normalizado en uno de los barrios que otrora fue vitrina turística del país.

Riesgo para la salud pública y nula respuesta institucional

La acumulación incontrolada de desechos representa un foco de enfermedades respiratorias, gastrointestinales y vectoriales. Sin embargo, ni el gobierno local ni el Ministerio de Salud Pública han emitido pronunciamientos o planes de acción visibles. El silencio oficial es ensordecedor.

Lo alarmante no es solo la ausencia de servicios públicos eficientes, sino la sensación creciente de que no hay voluntad política ni gestión pública enfocada en el bienestar ciudadano.

De El Vedado a toda Cuba: una crisis nacional

La situación no se limita a El Vedado. Lo mismo se vive en Centro Habana, Marianao, 10 de Octubre y otras zonas urbanas del país. La suciedad física refleja el grado de descomposición institucional que atraviesa el país.

Preguntas como:

• ¿Dónde están los recursos para la recogida de desechos?
• ¿Qué hace el gobierno municipal con las quejas ciudadanas?
• ¿Por qué el Ministerio de Salud Pública no actúa ante una crisis evidente?

…siguen sin respuesta mientras el pueblo carga con los desperdicios, y con el sistema que los genera.

Redes sociales: el último recurso de denuncia

Gracias a plataformas como Facebook, la ciudadanía ha comenzado a documentar y visibilizar esta situación. Pero la exposición pública en redes no ha provocado aún un cambio real. Lo que sí ha aumentado es la indignación colectiva, especialmente entre quienes recuerdan un Vedado limpio, cuidado y con servicios eficientes.

Conclusión: de la basura al símbolo de una crisis más profunda

El colapso de El Vedado por la basura no es un problema puntual ni una falla temporal. Es el resultado de una cadena de negligencias acumuladas, desidia institucional y abandono estructural. No se puede hablar de “ciudad turística” ni de “revolución social” cuando los servicios más básicos —como la recolección de basura— son inexistentes o ineficientes.

Mientras tanto, la ciudad se hunde en su propia basura… y en el silencio de quienes deberían responder.